lunes, 26 de marzo de 2007

Mi vida no la comparto con cualquiera...

Cuando algo es tuyo tienes el derecho de decidir compartirlo o no. Cuando se trata de mí vida, considero que estoy en todo mi derecho de no quererla compartir con cualquiera. No es egoísmo es simplemente cuidado, la quiero cuidar lo más que se pueda. Porque yo no sé lo que el otro pueda hacer con eso que le comparto y no quiero arriesgar lo más preciado que tengo. Por eso por lo que ahora he luchado y que en algún momento no aprecié y que descuidé, que no sabía cómo manejar y por lo tanto no le encontraba sentido.
Yo comparto sólo lo que quiero y puedo... En esta ocasión no quise compartirla. Insito, no por egoista sino por cuidadosa...

2 comentarios:

Benito Bodoque dijo...

Aquí el problema Almon-Ris es que no hemos sabido con quién compartir, estamos tan deseosas de que se descubra en nosotras a alguien especial, que le hemos dado perlas a los cerdos. No quiere decir que no haya gente digna de nuestra confianza, sino que hemos dado sin discriminar, y por eso lo que damos pierde valor. Imagínate que todos tuvieran un diamante... tener diamantes no sería ya algo especial.
Me parece por demás valioso que escojas no darte como el otro espera, sino como tú quieres. No tiene nada de malo, al contrario, estás en el buen camino de darle a quién realmente sepa qué está recibiendo.

Si no le parece, entonces hiciste lo correcto.

Te mando besos adorada!

cherry-blossom girl dijo...

Perlas a los cerdos es la frase clave en todo esto...